Seguro que cuando visita cualquier página de  internet o instala una aplicación en su teléfono móvil hace click en el “acepto” SIN leer los términos y condiciones de uso o política de privacidad que deben llevar las páginas web y las app con recogida de datos. Sepa que una gran mayoría  de las personas aceptamos a ciegas todos los términos.

Tal es así que la empresa PC Pitstop escribió hace unos años en sus términos y condiciones de uso que daría 1.000 dólares al primero que lo leyera. Tuvieron que pasar cuatro meses antes de que un usuario se diera cuenta de ello.

Realmente, estas reglas son escritas por abogados y sirven para proteger a las empresas más que a los usuarios que nos entregamos a estas políticas con los ojos cerrados.

Cuando abrimos  una cuenta de Gmail, el usuario acepta 16 páginas de términos y condiciones de uso y de privacidad, que si leyéramos nos llevaría  20 minutos de lectura. En un iPhone, habría que pasar cerca de 20 pantallas leer los términos de eBay.

Debes saber que la NSA utiliza el juego de Angry Bird para obtener datos de usuarios de móviles. Aplicaciones vulnerables como Google Maps o la que convierte a tu iPhone en una linterna, sirven para recopilar información privada de sus usuarios y que las empresas de publicidad en internet redirijan mejor sus mensajes. Los servicios de inteligencia británicos y estadounidenses podrían obtener esa información secretamente, desde raza hasta orientación sexual o estado civil.

El “acepto” mecánico por tanto supone, en muchos casos, una cesión de datos. Como apuntaba el Director de la Agencia Española de Protección de Datos: “La información personal adquiere cada vez un mayor valor económico”.